Capitulo 2
En las drogas
A mi primo Antonio, lo metió en las drogas "El chino", que es el hijo de la hermana de la cuñada de la que limpia en el bingo de la esquina de mi calle, muy amiga mia por cierto.
Un dia que , de casualidad, porque a mi no me gusta jugar, entré al bingo, estaba la Puri, en la puerta, que es muy amiga mia, desde el cole. Y me dijo:
- Hoy está a punto de caer el bingo gordo, el de los 60 kilos
Y a mi no me gusta jugar, pero me dije a mi misma, porque me gusta decirme cosas: "Anda que si me toca, la de bujeros que tapo. Hasta me puedo comprar una sarten nueva, y tirar la de la abuela".
Así que entre. Me jugué 25.000 ptas, porque a mi no me gusta jugar, pero nada, la Puri, me habia engañado, la muy... Como otras veces, me tuve que volver a casa sin dinero y sin las magdalenas que habia salido a comprar. Bueno , a lo que iba, que en el bingo estaba "el chino", y me dijo, que un dia de estos iba a pasar por casa a ponerme las cortinas que compré en Sancarlos hace 3 años. Y es que "el chino" se dedica a hacer chapuzas, cuando no está pinchandose, porque es un "drogatas".
Vino a las 3 semanas, y solo estaba mi Antonio, y en lugar de poner las cortinas, se pusieron unas rayas, que para qué. Cuando llegué a casa, sin poder comprar, porque me habia gastado todo en la tragaperras del bar del Jorge, me los encontré dormidos en el sofá, y con unos polvillos blancos sobre la mesa. Yo pensé que era harina, y rebocé los salmonetes para mi Juan, cuando viniese de la obra.
Que alegria se llevó mi Juan, cuando vió los salmonetes, rebozados, y mas alegre que se puso despues de comerlo, que se le abrieron los ojos como platos de sopa, y no hubo manera de bajarlo del armario del baño hasta la noche. Luego se pasó 4 dias cantando canciónes de la Piquer.
Pero mi sobrino se despertó con "el chino", y se comieron los salmonetes sobrantes y hasta las raspas que estaban en las basuras, y desde entonces, mi Antonio, no fué el mismo, y es que "el chino", me lo metió en las drogas
Otro dia continuaré con mas historias, que hay un montón, porque mi Antonio, da mucho de sí.
A mi primo Antonio, lo metió en las drogas "El chino", que es el hijo de la hermana de la cuñada de la que limpia en el bingo de la esquina de mi calle, muy amiga mia por cierto.
Un dia que , de casualidad, porque a mi no me gusta jugar, entré al bingo, estaba la Puri, en la puerta, que es muy amiga mia, desde el cole. Y me dijo:
- Hoy está a punto de caer el bingo gordo, el de los 60 kilos
Y a mi no me gusta jugar, pero me dije a mi misma, porque me gusta decirme cosas: "Anda que si me toca, la de bujeros que tapo. Hasta me puedo comprar una sarten nueva, y tirar la de la abuela".
Así que entre. Me jugué 25.000 ptas, porque a mi no me gusta jugar, pero nada, la Puri, me habia engañado, la muy... Como otras veces, me tuve que volver a casa sin dinero y sin las magdalenas que habia salido a comprar. Bueno , a lo que iba, que en el bingo estaba "el chino", y me dijo, que un dia de estos iba a pasar por casa a ponerme las cortinas que compré en Sancarlos hace 3 años. Y es que "el chino" se dedica a hacer chapuzas, cuando no está pinchandose, porque es un "drogatas".
Vino a las 3 semanas, y solo estaba mi Antonio, y en lugar de poner las cortinas, se pusieron unas rayas, que para qué. Cuando llegué a casa, sin poder comprar, porque me habia gastado todo en la tragaperras del bar del Jorge, me los encontré dormidos en el sofá, y con unos polvillos blancos sobre la mesa. Yo pensé que era harina, y rebocé los salmonetes para mi Juan, cuando viniese de la obra.
Que alegria se llevó mi Juan, cuando vió los salmonetes, rebozados, y mas alegre que se puso despues de comerlo, que se le abrieron los ojos como platos de sopa, y no hubo manera de bajarlo del armario del baño hasta la noche. Luego se pasó 4 dias cantando canciónes de la Piquer.
Pero mi sobrino se despertó con "el chino", y se comieron los salmonetes sobrantes y hasta las raspas que estaban en las basuras, y desde entonces, mi Antonio, no fué el mismo, y es que "el chino", me lo metió en las drogas
Otro dia continuaré con mas historias, que hay un montón, porque mi Antonio, da mucho de sí.
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