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Las reglas del juego

Las reglas del juego El fútbol, no es un tema que me apasione demasiado, pero cuando las cosas se hacen mal, creo que es necesario decirlo.
Me estoy refiriendo a que estando como estamos en el siglo XXI y con una cantidad increible de adelantos, seguimos haciendo de este deporte una tómbola dominguera en la que el premio gordo es que todo salga como debería salir. Las decisiones de lo que ocurre en el terreno de juego siguen bajo la responsabilidad de una persona que tiene a su cargo unos 7.000 metros cuadrados para inspeccionar que todo lo que ocurre, está dentro de un reglamento que muchas veces es interpretativo.
Los ayudantes(linieres) de este señor (árbitro), pueden recorrer una línea recta de unos 100 mts, y tiene que ver lo que ocurre a 70 metros enfrente de ellos. Parece una utopía, y por ello se cometen errores. Normal?.
Posiblemente se les esté pidiendo mas de lo que son capaces de ver y hacer, y por ello mismo, deberían adoptarse medidas que sirviesen a hacer de este deporte algo mas limpio equitativo.
Todas las semanas hay programas que analizan al detalle las jugadas dudosas, dando imagen de lo sucedido desde todos los ángulos posibles. Esos mismos planteamientos podrían ser aplicables en el terreno de juego en el momento en que se produce la jugada polémica. Eviaríamos muchos problemas, muchísimos problemas. Estamos convirtiendo este deporte en un arriegado juego en el que el señor de negro tiene muchas papeletas de convertirse en el objetivo de espectadores descontentos (con razón en muchos casos).
Ligas de fútbol millonarias, galácticas, Mundiales, europeos, Champions, etc, son competiciones donde se juega muchísimo dinero, y en la que equipos pueden ganar o perder cantidades impresionantes de ese dinero por una decisión equivocada.
En cualquier deporte el árbitro ideal es aquel que pasa desapercibido y que no influye para nada en el resultado, pero ¿cuantos casos de ese tipo se dan en un año?
Parar un partido durante unos segundos para comprobar una jugada no creo que sea excesivo, y esos que opinan que asi se pierde la "gracia" del juego, deberían opinarlo tras sufrir un abitraje nefasto e injusto en contra de su equipo preferido.
Al fin y al cabo si el deporte persigue que haya hermandad entre los contrincantes, convendría abogar por que fuera dentro de unas reglas de juego que se adoptan en igualdad de condiciones y sin dejar lugar al error.

1 comentario

Uno, grande y libre -

Cito:
"Al fin y al cabo si el deporte persigue que haya hermandad entre los contrincantes, convendría abogar por que fuera dentro de unas reglas de juego que se adoptan en igualdad de condiciones y sin dejar lugar al error."

Lo mismo que con la obra de los músicas. Así que, aplícaos el cuento, que sólo aceptáis las normas de juego cuando os conviene.